De Fortunata y Jacinta a Blade Runner (pasando por Kosovo)
Pues sí, algunos de los que escribimos este diario vivimos en una corrala madrileña (la misma, claro). Para quien no lo sepa, es un patio interior grande con corredores abiertos que dan a las puertas de entrada a los apartamentos, todo ello muy antiguo y castizo. En su origen eran viviendas humildes y hoy se mezcla eso con jóvenes independientes que quieren vivir en el centro, inmigrantes y abueletes de entonces, todo ello en paz y armonía
La nuestra, más bonita que ninguna, decidió instalar un ascensor, cambiar la instalación eléctrica y un montón de etcéteras que nos han dejado la cuenta corriente tiesa. Y eso, unido a las continuas obras, con sus cachivaches, suciedad, ruido, cables, etc ha empujado a los chulapos (que todos llevamos dentro) al caos y ahora mismo, entre tubo y tubo, le echamos un repaso a la obrerería nacional (¡uno me dijo que le sonaba de la noche!) e internacional (Ecuador y el Este a la cabeza).
Y lo peor: una vez acabe todo, vamos a contemplar, desde nuestro cristalino ascensor, cables y tubos adornando nuestra vida diaria; que los van a dejar bien por fuera. Que desastre.
Un día daremos un repaso al vecindario, que no tiene desperdicio y que nos hace sentir como en la famosa Casa de Guadalix: siempre vigilados. Por cierto, que abandone la Casa, Jany, la cubana y de paso el presentador rubio horrible. Además pegan ¿no?
La nuestra, más bonita que ninguna, decidió instalar un ascensor, cambiar la instalación eléctrica y un montón de etcéteras que nos han dejado la cuenta corriente tiesa. Y eso, unido a las continuas obras, con sus cachivaches, suciedad, ruido, cables, etc ha empujado a los chulapos (que todos llevamos dentro) al caos y ahora mismo, entre tubo y tubo, le echamos un repaso a la obrerería nacional (¡uno me dijo que le sonaba de la noche!) e internacional (Ecuador y el Este a la cabeza).
Y lo peor: una vez acabe todo, vamos a contemplar, desde nuestro cristalino ascensor, cables y tubos adornando nuestra vida diaria; que los van a dejar bien por fuera. Que desastre.
Un día daremos un repaso al vecindario, que no tiene desperdicio y que nos hace sentir como en la famosa Casa de Guadalix: siempre vigilados. Por cierto, que abandone la Casa, Jany, la cubana y de paso el presentador rubio horrible. Además pegan ¿no?
3 comentarios
Rebeca del Rio -
Mme. Dos Rombos -
yosoyesa -